Olympiacos: Fournier, Vezenkov y una reforma profunda
El campeón de Grecia debe disuadir a Bartzokas para que siga y solventar las bajas de como mínimo cinco jugadores, además de la grave lesión de Fall.
El Olympiacos, el mejor de la Euroliga de octubre a abril, cayó en las semifinales de la Final Four contra el AS Mónaco y se quedó sin su gran sueño, el de volver a ser campeón de Europa 12 años después. Era el superobjetivo, casi el único de la temporada, muy cerca de una obsesión y aún más para el entorno. Sin embargo, la maldición del primer puesto de la fase regular volvió a golpearlo, igual que en la final de Kaunas en 2023 ante el Real Madrid, donde era el favorito. Cuatro Final Four consecutivas, algo de enorme mérito y dificultad que, por ejemplo, ni el Madrid ni el Barça han logrado jamás (sí el Baskonia: 2005-08).
La eliminación en Abu Dabi generó muchas críticas, una de las dianas fue Georgios Bartzokas, de 59 años, que con uno más más de contrato y en el banquillo desde 2020 en su segunda etapa en El Pireo (en la anterior, 2012-14, ganó la Euroliga) se ha planteado si era el momento de dejar el club. El título de la liga griega conquistado el pasado domingo tras una polémica (y antideportiva) final ha suavizado las sensaciones. El tercero en cuatro años con Bartzokas. Ahora, en el Olympiacos andan de celebración y parece que su entrenador se replantea la situación. No es una Euroliga, pero si el rival dice que “destrozar al Olympiacos vale más que ganar el título europeo” y pierde, pues ese trofeo se revaloriza, porque fue la armada roja la que no dio opción al Panathinaikos: 1-3, las tres victorias seguidas tras superarlo previamente en el duelo por el tercer puesto continental.
Bartzokas: “Pensé que quizá no debería seguir”
“Mi objetivo siempre ha sido mantener al equipo unido. Y me preguntaba si era yo el que estaba alterando la unidad”, ha reconocido Bartzokas con el trofeo bajo el brazo. “Pensé que quizá no debería seguir en el Olympiacos. Si soy yo el que altera la unidad, debería irme. Ahora la temporada ha acabado con un final feliz. Quiero que se calme la situación, analizarlo todo en mi interior y la dificultad del proyecto”. El medio griego Sport 24 informa de que el técnico ateniense va a continuar; pero que, como mínimo, cinco jugadores van a dejar la entidad, una reforma profunda, aunque pueden ser más. Sin olvidar a Moustapha Fall, el pívot de 2,18 m que puede perderse la próxima campaña completa por una rotura del tendón rotuliano.
Sus dos grandes estrellas, Evan Fournier y Sasha Vezenkov, con un coste de más de seis millones de euros netos, continúan. Y siguen Thomas Walkup, Keenan Evans (pendiente de debutar después de una larguísima lesión), Saben Lee, Larentzakis y Papanikolaou. Y en Grecia dicen que Alec Peters también, pese a que haya perdido protagonismo a la sombra de Vezenkov y se le haya vinculado al Madrid.
Dorsey, McKissic, la lesión de Fall y cinco bajas
Tyler Dorsey tenía un pie fuera y su gran final liguera en ataque y defensa le ha dado valor a ojos del club, aunque para la entidad su actual contrato sigue siendo elevado y puede haber alguna conversación pendiente para resolver su futuro. Como con Shaquielle McKissic, que llegó a plantearse la retirada (en agosto cumple 35 años) y con las muy buenas sensaciones de la final liguera se ha venido arriba. La gerencia también ha dudado de su continuidad, pero ha tenido siempre la confianza de Bartzokas.
Nigel Williams-Goss y Moses Wright saldrán rumbo a Kaunas, al Zalgiris, mientras que Nikola Milutinov puede aterrizar en Milán pese a la lesión de Fall porque los os con el Armani fueron anteriores. El Olympiacos, según Sport 24, no cuenta con Naz Nitrou-Long, que acaba contrato, ni con Luca Vildoza, que el verano pasado llegó desde el Panathinaikos y firmó por dos campañas, por lo que, en caso de prescindir del argentino tendrían que indemnizarle.
Las bajas de Goss y de Milutinov son de calado y el resto jugadores no resultarán tan fáciles de sustituir en un mercado de fichajes inflacionista y con escasez de grandes talentos. Una pieza importante en la pasada Euroliga, Filip Petrusev, disputó la competición en el Estrella Roja decidido por la escuadra de El Pireo. Los de Belgrado ya trataron una posible compra del pívot, que acaba contrato en 2026. Habrá que ver si la situación ha cambiado. El mercado está aquí.
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